Los cambios en el mercado inmobiliario tras el confinamiento no se han hecho esperar. Algunos de ellos eran predecibles, pero otros han surgido de forma inesperada.
Algunos expertos en la materia consideran que una inmensa ola económica golpea con fuerza las ventas y alquileres, mientras que otros analistas, observan oportunidades en un sector con una inesperada demanda extranjera de inmuebles en España.
Los expertos coinciden en un punto. Si se prolonga la crisis sanitaria con seguridad se ajustará el comportamiento de la actividad en el mercado de bienes raíces, un sector que este 2020 es más sensible al factor social.
Estabilización o bajada. ¿Cómo será el comportamiento del mercado inmobiliario después del confinamiento?
Los expertos opinan que el comportamiento del mercado inmobiliario post-confinamiento será variable. Aseguran que el precio de las viviendas estará estrechamente ligado al PIB. Se prevé incluso una caída de entre el 6,5 y el 13,5%. Después de ello, se espera que el mercado inmobiliario vuelva a la dinámica que presentó en 2019, es decir, que oscile entre la estabilización y la bajada.
En ciudades como Barcelona y Madrid, la bajada se notará menos. En regiones rurales, poco industrializadas o con alta afluencia de turistas el impacto será mucho mayor.
Por otro lado, se estima que los más beneficiados serán aquellos que, a pesar del largo confinamiento, aún cuenten con algunos ahorros. Ellos tendrán las mejores oportunidades en el mercado inmobiliario post-cuarentena.
En general, se plantean dos posibles escenarios para este 2020 para el mercado inmobiliario.
En caso que la recuperación del mercado tras el confinamiento se produzca de forma rápida, se estima que las operaciones inmobiliarias alcanzarán los 450.000. Esto representa una caída del 10% con respeto a la cifra esperada, unos 500.000.
El otro escenario se daría si la recuperación se produce de forma más lenta. En ese caso, se espera una caída del 20%, es decir, 400.000 en vez de los 500.000 esperados.
¿El Covid-19 frenó al mercado inmobiliario?
El número de transacciones inmobiliarias ha experimentado un frenazo por la crisis sanitaria. Las extensiones del confinamiento produjeron que se elevara el stock de inmuebles y disminuyera el proceso de compra venta.
Al bajar la demanda es lógico que el precio de las viviendas disminuya. Se estima que pueda hacerlo entre un 10 y un 15%. En el caso de los alquileres, las variaciones serán menores. Hasta ahora los propietarios tratan de adaptarse a la situación bajando ligeramente precios.
En cuanto al mercado hipotecario, la tendencia es similar. Esta convulsión representa un excelente momento para buscar oportunidades. Se prevé que los tipos de interés sigan siendo bajos y que el Euribor se mantenga en negativo. Además, se estima que las condiciones de las entidades bancarias tampoco varíen a corto plazo.
En conclusión, el mercado inmobiliario se adapta a la nueva normalidad tras una larga etapa de confinamiento. Se abre un nuevo horizonte de oportunidades para unos y de bajadas para otros.
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